Pues ayer, por fin, cayeron. El Pallardi y el Ttutturre se elevan en el lado opuesto al Balerdi, la proa de las Malloas. Había que ganarlas no de cualquier manera, sino merecidamente.
Entorno: Malloas de Aralar, valle de Araitz (Navarra - Gipuzkoa)
Inicio y final: Intza, a 2km de Betelu
Cumbres: Pallarsdi 1.286m y Ttutturre 1.281m
Tiempo total invertido: 5.40h con un despiste de unos 40min.
Desnivel positivo: 1.000m
De nuevo me acompaña Andy, que del último repor ya ha visitado el alpino Gran Paradiso y el sietemil Pico Lenin. Escandalosa progresión la suya. Un crack.
Son las 9 de la mañana y empezamos desde el mismo pueblo de Intza con mejor tiempo del pronosticado

Cogemos el camino de cemento que sube por estos caseríos, hasta el último de ellos, Ansonegoikoa, donde el cemento da lugar a pista

Vistazo al Balerdi y Uakorri, viejos conocidos...

Elizalde, el penúltimo caserío, visto desde arriba

Llegamos a este punto con buenas vistas donde la pista, en una curva a la izquierda, se interna en el bosque y, seguidamente sale un desvío marcado con hito a la derecha

Ahí delante está el desvío a la izquierda...

Además del hito, un poco más arriba existe esta marca de pintura del tronco. A partir de aquí el sendero nos subirá sin descanso hasta un punto importante: la fuente de Agina

Un tramo fuera de bosque

Gran mirador a las Malloas, a las que les quedan pintas de nieve

Valle de Araitz


Encantador bosque, camino de la fuente




Llegamos, tras 1.15h de subida, a la fuente de Agina. Descanso y pequeño avituallamiento. El ritmo es bueno

Estamos en el punto de inflexión, que digamos. A la derecha de la fuente, unos metros más abajo, nace un senderito que se pierde enseguida y que debemos continuar instintivamente hasta que reaparece. Em la foto habría que seguir por detrás de mi compañero, subiendo en diagonal

A la izquierda de la fuente vemos el camino por el cual descenderemos a través de la ladera herbosa, desde Abateko Lepoa

Se adivina el sendero que pasa bajo este árbol caído

Alcanzamos un pequeño hombro y damos vista a esto, que será la tónica a superar durante un buen rato, laderas inclinadas de hierba no aptas para gente con vértigo. Salvaje y solitario


Las Malloas vistas desde las Malloas, metidos de lleno en ellas. Una ruta de altura. Poca gente se ve por aquí, me consta...
Desde este hombro vemos hasta donde creo que debemos ir, que es aquel otro hombro con dos neveros. No estaba en lo cierto. El camino correcto llega hasta el del medio de la foto y luego se interna en el bosque superior camino del collado de Illobi


Avanzamos entre severos tapados por tierra y hojarasca, algunos de ellos perduran durante todo el año

Vamos como en un balcón, vertiginoso por momentos

Camino del hombro supuestamente bueno, buscando el sendero que de pierde continuamente, en un tramo boscoso


Nos damos cuenta de que no hemos subido lo suficiente y remontamos unos metros a lo jabalí hasta que nos topamos con él, por suerte. Hay tramos de barro engorrosos que nos hacen sudar

Seguimos el sendero que se intuye a media ladera... Qué sensación caminar por aquí!

La caída hacia el valle de Araitz es impresionante


En el hombro equivocado, aunque con una maravillosa postal del Irumugarrieta. Me doy cuenta del error, debemos retroceder hasta el anterior bosque y toparnos con el desvío al collado Illobi. Maldigo mi mal hacer aunque sólo perdemos 40 min...

Desvío al collado Illobi, hay restos de pintura morada y hitos


Illobi Lepoa, tras 3 horas desde Intza. Olemos la cumbre y hay ganas de llegar, lo más difícil, física y orientativamente, está hecho. Pero nos sentamos a la sombra de una joven haya a reponer fuerzas, lo necesitamos. Pega el sol sorprendentemente, ya he dicho que los pronósticos no eran nada halagüeños

Casi mil metros más abajo, el valle


Enfilamos derechos y sin miramientos los últimos metros con trepadas sencillas que defienden la cima del Pallardi o Ttutturregi 1.286m.
Sensación de haber hecho algo grande, como hacía tiempo no sentía. Mucho tiempo esperando a que se juntaran los astros para disfrutar de esta vista y mostrar respeto a esta exigente cumbre como se merece, desde el pueblo, desde la civilización, haciéndose de rogar y obligándonos a lo mejor de nosotros

Los rasos de Aralar

Llega Andy, que se ha entretenido con un pasito de escalada, que la echa de menos


No perdemos mucho tiempo, lo justo para no enfriarnos, sacar las conmemorativas fotos, admirar el increíble entorno. Nos queda una segunda cumbre para completar la serie. Para ello, cresteamos por el filo del Pallardi hasta una depresión con una txabola, a la cual bajamos

El camino se intuye sin problemas hasta el Ttutturre

Del collado que separa ambas cumbres seguimos esta veta de piedras y alcanzamos la cumbre bordeando por su izquierda

Ttutturre 1.281m. Ya está. Objetivo cumplido, a falta del descenso.

Malloas, con Pallardi en primer término

Comemos un buen tupper de pasta, jamón, queso, etc. acompañados de rachas de viento y nada más. Ni siquiera en las cimas nos hemos topado con nadie. Oteamos a lo lejos los nevados Pirineos.
Nos queda el descenso; para ello, debemos bajar a Abateko Lepoa y continuar entre los dos espoloncillos herbosos de la izquierda

Beriain a la derecha, otro viejo conocido

Descendemos animadamente del Ttutturre por fáciles laderas hasta coger el sendero que nos llevará hasta la fuente de la mañana


Superado Abateko Lepoa, el camino nos lleva junto a este solitario mugarri de dirección


La ladera de ascenso, ahora la tenemos de frente

Y de esta manera, volviendo a refrescarnos en la fuente y desandando el camino de subida, vamos dando por conquistada esta ruta de media montaña en altitud y alta montaña en todo lo demás, exigente en físico y en orientación, pero que recompensa con creces el esfuerzo.

Caminos diferentes, fuera de lo normalizado y de lo homologado, que aportan ese plus de lo que significa la montaña para nosotros y para mucha gente. Haciendo camino al andar.

Gracias también a las referencias y reseñas de gente intrépida que nos enseñan estos y otros caminos y lugares semidesconocidos. El resto, lo debemos poner nosotros, y con mucho gusto
