El pasado martes nos acercamos Iran y yo al Valle de Ayala con la idea de ascender el Ungino, uno de los montes pertenecientes a la Sierra Salbada y que, desde abajo ofrece un aspecto de fortaleza casi inexpugnable.
Dejamos el troncomóvil en el pequeño pueblo de Madaria, algo más adelante del pantano de Maroño, y atravesamos por la pista de cemento hasta los últimos baserris...
El Ungino desde Madaria
Sin perder el camino principal, que en esta época del año está de barro hasta arriba, ganamos altura atravesando un total de 3 langas. El día nos acompaña, hace fresco pero enseguida entramos en calor con estas pendientes, sin perder de vista el objetivo.
Ganamos altura paso a paso.
De frente seguimos teniendo la mole del Ungino, la cual vamos atacando en diagonal hacia su izquierda, para ganar las lomas de la sierra por el Portillo de Atatxa.
El Valle y el Tologorri, detrás.
Poco a poco se intuye el Portillo...
Una vez en el Portillo de Atatxa, sólo nos queda subir esa campa ascendente hasta lo más alto.
El Gorbea al fondo.
Casi casi en la cima, pasamos delante (o por encima) del famoso ojo del Ungino.
.Y 50 metros más, llegamos al ajado buzón cimero tras 1.50h de paseo. Ungino (1.094 m.). Con un tiempo excelente para ser enero, nos tiramos media hora entre comer, sacar fotos y disfrutar, en una palabra...
El Eskutxi, a un paso, pero lo dejaremos para otra ocasión...E
La característica proa del Tologorri.
Y tras 4.15h ponemos punto final a esta agradable jornada por una zona que no conocíamos anteriormente y nos ha encantado por su belleza y tranquilidad.
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